Eramos pocos...

lunes, 25 de abril de 2011

Días moviditos

Por si no fuera suficiente lo de Chispitas, el otro día Pita atacó la jaulita de Pol, hasta tirarle abajo su suite panorámica, una habitación transparente que se pone a continuación de la puerta de entrada a la jaula y desde la que se ve todo.
Pol que siempre durme ahí cayó al suelo, Pita le agarró con los dientes, Pol chilló, Pilta asustada por el chillido le soltó y Pol salio disparado por toda la terraza hasta caer barandilla abajo y quedar espachurrado, inmóvil en el suelo.
No se movía, así que fui a recogerle al jardín y ahí empezó a moverse nuevamente un poquito. Pero era incapaz de andar recto, con la cabeza ladeada todo el rato y un horrible tic que se la hacia girar continuamente para un lado.
Ese día ya era tarde, lo metí en la jaula y le deje descansar.
Al día siguiente el veterinario de abajo dijo que el no tenía los medios para mirarle pero que si decidia sacrificarle, me lo haría sin problema.
Menudo dilema... se le veía mal, pero iba comiendo y bebiendo y mordisqueandose los huesos... así que decidí esperar. Así estuvo unos 3 días, después se subió a la rueda y empezó ha hacer ejercició día y noche... no paraba... a cualquier hora.
Las ganas de recuperarse de este animalito eran increibles, nos estaba dando una lección que no olvidaremos nunca. A los 7 u 8 días de la caida se bajo de la rueda agotado, se tumbó en su camita y murió.
Ahora yace junto a Chispitas en la ladera del castillo.
Al ir a enterrarle la tumba de Chispitas había sido asaltada por un animal hambriento, así que tuvimos que reconstruirla.

Foto tumba Chispitas inicial:



Foto tumba nueva: Chispitas junto a Pol:


miércoles, 6 de abril de 2011

Princesa Chispitas

Princesa Chispitas dormirá por siempre junto a un castillo y eternamente en nuestros corazones.